El Bar de las Orugas

de Gustavo Ramírez Meléndez

Editorial Vocho Amarillo

 Por Laura Rojas


Una de las formas más sencillas de esconder nuestras pupilas del sol, de la manera más útil, elegante y precisa, es cerrar los ojos con firmeza. Donde podemos mirar el claroscuro de su rostro, las luciérnagas que se desprenden para encarcelarse en los párpados y que antes orugas, se embriagan en el humor vítreo, para después despertarse ciegas de cruda agonía y esparcirse en cuerpos flotantes. Su aroma nos asfixia y nos deja atónitos, los ojos pestañean hasta llegar el eclipse.

 

Así salimos de El Bar de las Orugas de Gustavo Ramírez Meléndez, con el sol pegándonos como un faro producto de las secuelas mileniales del Big Bang, escribir desde la otredad. Inicia recordándonos la difícil travesía de lunes a domingo, de cómo van contrayéndose poco a poco, hasta un estirar de mano con el tiempo. 

Un libro que nos hace recorrer en hemisferios el poema, la existencia vista desde un origen como un viaje de astronauta y al mismo tiempo en un submarino, que nos sumerge como un proyectil al mar profundo del universo, para después salir disparados como ballesta al vacío inconmensurable del océano: "Por no seguir las instrucciones/ El universo es un /experimento salido de control/ Se derramó el ácido de la probeta/ y en seguida vino la explosión/ Del culpable ni sus luces".

 

De oruga a luciérnaga, empieza a madurar el poema para terminar convirtiéndose en mariposa, como lo menciona en el verso: "Abrí la ventana/ y cacé al vuelo una paloma/ El gusano que se agitaba en su pico/ era yo". Donde las leyes básicas de la física se presentan de manera inevitable, se aplican en la inventiva de nuestras turbaciones, aunque sin dejar de lado a un dios que se esconde, que no habla, que se burla, que el suplicio de presencia se versifica mediante el reclamo: "Escúchame Dios de todos pocas veces mío/ el miedo me ha talado la certeza de no necesitarte/ te llamo enteramente a medias/ tímido y cabizbajo/ buscando un rasgo tuyo en las arrugas del concreto".

Y que al fin aparece como enemigo después de la guerra. Su visión reposa sobre una probeta antes que erosione el mundo:"Como un Tsunami/ Tras los escombros/se levanta la luna/ esqueleto del sol".

 


Gustavo Ramírez Meléndez, San Luis Potosí S.L.P, 4 de Junio de 1984. Escritor y Doctor en Ciencias Aplicadas por la UASLP. Publicó el libro de poesía “El Bar de las Orugas” (Editorial Vocho Amarillo, San Luis Potosí, 2017), el libro de cuentos "Laboratorio 11 AM: Relatos de luz y sombra" (Grupo Editorial Endira México, 2015). Primer lugar de ensayo en el X concurso Nacional y II Iberoamericano “Leamos la ciencia para todos” (Fondo de cultura económica 2008). Colaboración en las antologías: “Cuentos Potosinos” (H. Ayuntamiento de San Luis Potosí 2010),“2ª antología Caligrama. Cuentos de horror, fantasía y ciencia ficción”(Caligrama Editores 2011, México DF), “Historia y Literatura, una mirada desde la región” (Ed. Ponciano Arriaga 2014, San Luis Potosí), Palabras Libertas (Ed. Ponciano Arriaga 2015, San Luis Potosí) y “Variopinto” (Ed. Vocho Amarillo, San Luis Potosí 2017). En 2021 publicó de manera independiente el libro de ensayos “Entre metáforas y electrones”, del mismo modo, en 2022, la novela “Tempo Extra”.




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Laura Rojas

 

Poeta, narradora, activista, editora, gestora y promotora cultural. Directora de la Editorial Letra Púrpura. Ganadora de la mención honorífica del premio 20 de Noviembre, Manuel José Othón, 2012. Mención honorifica del premio nacional Dolores Castro, autora de los libros Malandra (Ediciones el viaje 2013), La casa de los Jacintos (Edit. Vocho Amarillo, 2020) Mecanismos de defensa (Premio Dolores castro 2022). Actualmente es docente de la coordinación de arte de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

            



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